Debemos transformar este centro de Eerde y el mundo todo en un verdadero Reino de
Felicidad y debéis ayudar porque vivís en él y lo estáis creando con vuestras aptitudes, vuestros sufrimientos, vuestras dichas, placeres y goces como materiales de construcción; pero debéis ayudar todos y no uno solo. Por esto debéis ser grandes, por esto debéis vivir y alentar únicamente en el Reino de la Felicidad. Habéis de destruir toda barrera, toda mezquindad en vuestra perspectiva. No podéis figuraros cuán deleitoso, cuán conmovedor y placentero es ello. Lo es mucho más que un espectáculo de cine o cualquier otra diversión mundana.
Jiddu Krishnamurti . El Reino de la Felicidad .