Dicen los Oráculos caldeos: “El Dios del mundo es eterno, ilimitado, joven y viejo y
de forma sinuosa” (31). La frase “forma sinuosa” es símbolo de la vibración de la luz Astral que los sacerdotes de la antigüedad conocían perfectamente, aunque no tuvieran del éter el mismo concepto que los modernos, pues por éter significaban la Idea eterna, compenetrada en el universo, es decir, la Voluntad que actualizada en energía organiza la materia.
H.P. Blavatsky . Isis sin Velo. Tomo 1 .