Hemos visto ya que el átomo químico, por ejemplo, denota inteligencia, vestigios de una mente
discernidora y de una rudimentaria capacidad selectiva. Así la diminuta vida dentro de la forma atómica manifiesta cualidad psíquica. El átomo entra en la construcción de las diferentes formas en distintas épocas y etapas, y cada vez adquiere algo de acuerdo a la fuerza y vida de la entidad que anima esa for¬ma y mantiene su homogeneidad. Tomemos, por ejemplo, el átomo que se utiliza en la construcción de una forma del reino mineral; no sólo demuestra mente discernidora y selectiva, sino también elasticidad. En el reino vegetal aparecen estas dos cualidades y además una tercera, podría denominársela sensación rudimentaria. La inteligencia inicial del átomo adquiere algo durante la transición de una forma a otra y de un reino a otro. Acrecienta su respuesta al contacto y su percepción general. Cuando tratemos de la evolución de la conciencia consideraremos más ampliamen¬te este punto; pero ahora me limito a demostrar que las formas del reino vegetal construidas por átomos, no sólo denotan discernidora inteligencia y elasticidad, sino tam¬bién capacidad de sensación, o de lo que en el reino vegetal corresponde a la emoción o sentimiento, pues la emoción es amor rudimentario. Sigue luego el reino animal, donde las formas animales, no sólo demuestran las cualidades mencionadas, sino el instinto, o lo que algún día florecerá como mentalidad. Finalmente llegamos al ser humano, que muestra todas estas cualidades en un grado superior, pues el cuarto reino es el macrocosmos de los tres reinos inferio¬res. El hombre demuestra actividad inteligente, es capaz de sentir emoción y amor y ha agregado otro factor, la volun¬tad inteligente. Es la deidad de su propio y pequeño sistema. Y no sólo es consciente sino autoconsciente. Construye su propio cuerpo de manifestación, como lo construye el Logos, aunque en menor escala. Rige su sistema por la ley de atrac¬ción y repulsión, lo mismo que el Logos, y energetiza y sin¬tetiza su triple naturaleza en una coherente unidad. Es el tres en uno y el uno en tres, lo mismo que el Logos.
Alice A. Bailey . La Conciencia del Átomo .