La meditación es un movimiento en lo desconocido y de lo desconocido. Uno no existe,
sólo está el movimiento. Uno es demasiado pequeño o demasiado grande para este movimiento que no tiene nada detrás ni delante de sí. Es esa energía que el pensamiento-materia no puede alcanzar. El pensamiento es perversión porque es producto del ayer; está preso en las redes de los siglos y por eso es confuso, carente de claridad. Hagamos lo que hagamos, lo conocido no puede alcanzar lo desconocido. La meditación es un morir para lo conocido.
Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .