Corazón del hombre, haz que la mar esté en calma y sea más segura. Destruye
todos los escollos que hay esparcidos en ella y apresúrate a lanzar el navio y soltar todas sus velas, pues las naciones extranjeras esperan con impaciencia su llegada para tener su subsistencia y eres tú quien los tiene en la miseria y en la penuria.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .