Sucedió una vez que un rey egipcio se volvió loco. Era un gran jugador de
ajedrez. Probaron todas las medicinas, se ocuparon de él todos los médicos, pero nada, ningún alivio. Y se estaba hundiendo más y más en la locura. Entonces llegó un faquir, un místico sufí, y dijo: «¡Esperad! Si podéis traer a un gran jugador de ajedrez resultará de gran ayuda. Tiene que jugar al ajedrez con este rey loco.» Ahora bien, ¿quién querrá jugar al ajedrez con un loco? Pero el rey estaba dispuesto a ofrecer todo el dinero que le pidieran. Un jugador de ajedrez se mostró dispuesto... ¡Tanto dinero! Y el místico tenía razón: después de un año el rey estaba perfectamente cuerdo. Pero el jugador de ajedrez se volvió loco.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .