Pero para eso, Maitri, tendrás que entrar un poco más en esta nada. Primero la
nada es negativa; lo negativo es el núcleo externo, la cáscara. Si profundizas un poco más, encontrarás la nada positiva. La nada positiva es lo que Buda llama nirvana, iluminación, shunya. Cuando has profundizado y has cruzado la cáscara —la parte negativa dura, la parte oscura—, de pronto hay luz, la noche ha terminado. Y entonces sientes un tipo totalmente nuevo de soledad que nunca has sentido antes, y entonces conoces la diferencia entre aislamiento y soledad. En el aislamiento buscabas al otro, en la soledad el otro ha desaparecido y el ego también ha desaparecido. Ahora no hay nadie dentro ni nadie fuera, y todo es uno. Esta unidad, esta absoluta unidad trae consigo una bendición. Entonces no hay miedo, no puede haberlo, porque ahora no puede haber muerte; ¿cómo va a haber miedo? La muerte ya ha sucedido, lo que podía morir ya ha muerto. Ahora estás en el mundo de la inmortalidad, has encontrado el elixir. Éste es el néctar del que hablaremos una y otra vez en estos sutras de El secreto de la Flor Dorada. Este es el néctar, amrit. Éste es el elixir, la piedra filosofal. Una vez que lo has saboreado, toda muerte ha desaparecido, todo tiempo ha desaparecido, todas las distinciones han desaparecido. Ahora verás el árbol como tu extensión, la nube como tu extensión, o tú como la extensión del árbol. Ahora el centro está en todas partes y en ninguna parte. El «yo» ya no existe. La palabra misma se ha vuelto absolutamente falsa.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .