Puede que hayas oído la famosa frase de Descartes, "Cogito, ergo sum - Pienso, luego
existo". Dudar es pensar: yo dudo, luego existo. Pero esto es sólo un comienzo y Descartes nunca, nunca, trascendió este comienzo. El fue hacia atrás. Puedes volver hacia atrás por la misma puerta. El es feliz por haber encontrado un centro, un centro del que no se puede dudar, y luego empieza a desarrollar su filosofía. De modo que todo lo que él había negado anteriormente, lo introdujo por la puerta trasera: "Debido a que yo estoy aquí, ha de haber un creador que me haya creado". Y así, continuó: luego, el cielo y el infierno; luego, Dios y el pecado,... y toda la teología cristiana se introdujo por la puerta trasera.
Osho . Yoga: La Ciencia Del Alma Vol 1 .