Cada estudiante debe comprender que su única incumbencia es la de armonizar, apurar y expandir

su propia mente y su mundo. Una vez que los estudiantes comprendan que la única demanda imperativa de la «Gran Ley de su Ser» es la armonía de su mente y sentimientos, la Perfección se manifestará rápidamente. Si esto no es mantenido, no podrán pasar de cierto grado de progreso.

Saint Germain . El Libro de Oro de Saint Germain .

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