Por lo tanto, la negación es el movimiento de la meditación, y no hay camino

ni sendero ni sistema que puedan conducir a una mente superficial y parlanchina hasta las alturas de la bienaventuranza. El ver esto instantáneamente es la verdad que libera de sí misma a la mente superficial. Y la humildad está siempre al principio, pero no hay principio ni final. Y esto es bienaventuranza más allá de toda medida.

Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .

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