Es por esto por lo que la metafísica religiosa, se ha expuesto más frecuentemente en
forma mitológica que filosófica. La fábula o mito llega más fácilmente a la conciencia de las gentes que el razonamiento lógico; y esto ocurre sencillamente porque el primero va acompañado del factor sentimental. También el arte, que despierta en nosotros "intuiciones estéticas", es un elemento de inapreciable valor para la iniciación. Muchas cosas que no llegan a nuestra conciencia por el camino de la inteligencia racional, si llegan por el camino de la "intuición estética". La sublimidad de la emoción divina, que muchas veces no puede concebirse por simple descripción literaria, puede lograrse oyendo música religiosa de Haydn, de Haendel, de Bach, de Beethoven o de Wagner. La comprensión de lo que supone el estado del alma "en el infierno", es más fácil escuchando los preludios de los actos 2 y 3 del "Sigfredo" de Wagner que leyendo las espeluznantes descripciones del Dante. Una "madona" de Rafael da más idea de la virginidad o "pureza del corazón" que los más elocuentes textos mariolátricos.En fin: - Los que soñamos con una humanidad mejor, y tenemos fe en que puede conseguirse, siquiera sea entrando por el "angosto camino" y por la "puerta estrecha" que conducen a la salvación, debemos pensar seriamente en todo cuanto queda expuesto y tomar nuestro báculo y comenzar paciente y fervorosamente el ascenso por el "sendero" que conduce a la anhelada cima.
Eduardo Alfonso . La iniciación .