Es una mañana de primavera y el aire está de fiesta; hay festivales en todo

el mundo por ser la primavera. Los festivales se expresan de muchas maneras diferentes, pero aquello que es, jamás podrá expresarse en palabras. En todas partes, con cantos y danzas, existe este hondo sentimiento de la primavera. ¿Por qué parecemos estar perdiendo la condición altamente vulnerable de la sensibilidad sensibilidad a todas las cosas que nos rodean, no sólo a nuestros problemas y confusiones? Ser realmente sensibles, no con respecto a algo en especial, sino sólo eso: ser sensibles, vulnerables como esa hoja nueva que nació hace unos días para enfrentarse a las tormentas, a las lluvias, a la oscuridad y la luz. Cuando somos vulnerables nos parece que se nos ha lastimado; al sentirnos lastimados nos encerramos en nosotros mismos, construimos alrededor de nosotros un muro, nos volvemos duros, crueles. Pero cuando somos vulnerables sin ninguna clase de feas y brutales reacciones, vulnerables a todos los movimientos de nuestro propio ser, vulnerables al mundo, tan sensibles que no hay remordimientos ni heridas psicológicas ni disciplinas autoimpuestas, entonces existe la cualidad de una existencia inconmensurable.

Jiddu Krishnamurti . El Último Diario .

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