Tienes que convertirte en un gran depósito de energía. Y cuando te vuelves un depósito

y no se malgasta la energía, su nivel empieza a ascender más y más cada día; y un día llega al tercer ojo. Y en el momento en que la energía toca el tercer ojo, inmediatamente, instantáneamente, empieza a funcionar. Y entonces sabes, y entonces ves por vez primera. Entonces tienes la visión de la vida: lo que es. Y solo a través del tercer ojo serás capaz de conocer a Dios, la realidad, lo que es.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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