Buda, Cristo y otros grandes Instructores del Mundo fueron a la fuente de la vida.
Llegaron a ser Maestros artistas. Mas una vez conocida la naturaleza y suprema grandiosidad de la Fuente, se convirtieron en la Fuente, el Sendero, y la Personificación de la Sabiduría y el Amor. Tal debe ser nuestro propósito. No podéis ser el Buda o el Cristo, pero podéis tener los mismos sueños, anhelos, deseos y aspiraciones.
Jiddu Krishnamurti . El Reino de la Felicidad .