La mente desea, y si hay deseos, entonces surgirán oportunidades en las que se satisfarán

esos deseos. Dios coopera contigo. Si tienes deseos como los de un perro, te convertirás en un perro, tendrás el cuerpo de un perro. Tu mente crea el cianotipo, y luego el cuerpo lo sigue. El cuerpo es una proyección de la mente, no viceversa. A menos que la mente desaparezca completamente, volverás a nacer una y otra vez. Una vez que se ha ido la mente, entonces es perfectamente cierto, Hamid: el cuerpo desaparece y eres el infinito. De hecho, si no está la mente, eres el infinito..., sin la desaparición del cuerpo, sin la muerte del cuerpo. No hay necesidad de esperar a eso.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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