Los gobiernos, las estructuras sociales, se han cambiado muchas veces, pero nada cambia realmente. Se

vuelve a repetir lo mismo. Por eso no llamo revolucionarios a mis sannyasins, sino rebeldes, para marcar la diferencia. La revolución está demasiado contaminada con la idea social. La rebelión es individual. ¡Rebélate! Toma la responsabilidad de tu vida. Desecha todas las tonterías que han puesto dentro de ti. Desecha todo lo que te han enseñado y empieza a aprender de nuevo desde el abecé. Es un viaje duro, arduo. Y recuerda una cosa más: que los sistemas y los gobiernos creados para hacer frente a algo comienzan siendo útiles y gradualmente se vuelven contraproducentes. Ésta es la naturaleza del proceso evolutivo mismo. Lo que sucede en el exterior al principio puede parecer que es muy productivo, pero pronto se vuelve contraproducente..., porque la vida sigue cambiando. La vida sigue dando saltos a lo desconocido y vuestras estructuras siempre van a la zaga y cada estructura se vuelve a su vez una tumba. Hay que volver a romperla. Pero os estoy mostrando un camino en el que no hay necesidad de ninguna estructura interna. La consciencia puede permanecer sin estructurar. Ése es el significado de la palabra «libertad». La consciencia no necesita tener ninguna estructura, ningún carácter. La consciencia puede vivir momento a momento sin ninguna estructura, sin ninguna moralidad, sin ningún carácter, porque la consciencia es suficiente. Puedes responder, y tu respuesta será buena y virtuosa porque respondiste conscientemente.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

Índice