Un filósofo inglés dijo lo siguiente: «El poder corrompe; el poder absoluto corrompe absolutamente». Yo

no estoy de acuerdo. Mi análisis es completamente distinto. Todo el mundo está lleno de violencia, avaricia, cólera, pasiones... pero como no tiene poder, es un santo. Para ser violento hay que ser poderoso. Para satisfacer la avaricia hay que ser poderoso. Para satisfacer las pasiones también hay que ser poderoso. De modo que cuando el poder cae en tus manos todo se revuelve en tu interior. El poder se convierte en tu alimento, en tu oportunidad. No es que el poder corrompa, sino que tú estás corrompido. El poder únicamente saca la corrupción a la luz. Si quieres matar a alguien y no tienes poder, no lo haces, pero si lo tienes, lo matas.

Osho . El libro del ego .

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