Vimos que la evolución, sea de la materia o de la inteligencia, conciencia o espíritu,
consiste en el siempre creciente poder de responder a la vibración que, mediante un constante cambio, progresa por la aplicación de una política selectiva o el empleo de la facultad discernidora y por el método de desarrollo cíclico o de repetición. Las etapas que caracterizan al proceso evolutivo podrían clasificarse en tres, y corresponden a las de la vida del ser humano: niñez, ado¬lescencia y madurez. En lo que concierne al hombre, se ma¬nifiestan en la unidad humana o en la raza, y a medida que transcurren y progresan las civilizaciones, se podrá observar la misma triple idea en toda la familia humana, y así nos cercioramos del divino objetivo, estudiando su imagen o reflejo, el HOMBRE. Podemos expresar estas tres etapas en términos más científicos y vincularlas con las tres escuelas de pensamiento referidas, y las analizaremos como: a. La etapa de energía atómica, b. La etapa de coherencia grupal, c. La etapa de la existencia unificada o sintética.
Alice A. Bailey . La Conciencia del Átomo .