¿Qué es la iluminación? La capacidad de verse a uno mismo tal como uno es

realmente. Estamos absolutamente vacíos de ego. El ego es solo una ficción. Lo hemos creado, lo hemos proyectado; es nuestra ilusión, nuestro sueño; no existe, no existe en sí mismo. De manera que cuanto más consciente te vuelves y miras dentro, menos te encuentras a ti mismo. Cuanto más consciente te vuelves, menos eres. Y en el momento en que la consciencia es total, has desaparecido: no más agua, no más reflejo de la luna en el agua, vacío en tus manos. Y es el vacío...; «con eso se resuelve la cuestión». Esto le sucedió a Chiyono: había estudiado durante años, había practicado todo tipo de meditaciones, había cultivado todo tipo de técnicas, pero no podía encontrar la iluminación. No puedes causarla. Está más allá de ti. Si pudieras causarla, entonces de nuevo no sería nada más que una nueva condecoración de tu ego. No puedes causarla. No puedes hacer que suceda. Tienes que desaparecer para que sea. De manera que puedes estudiar todas las escrituras del mundo: te volverás muy culto, erudito, pero seguirás sin iluminarte. De hecho, estarás menos iluminado que antes, porque cuantos más conocimientos tienes más ego tienes, cuanto más practicas técnicas ascéticas más se fortalece tu ego: «Estoy haciendo esto y estoy haciendo aquello, y he hecho tanto..., tantos ayunos, tantas inclinaciones.» Cuanto más haces, más sientes que ahora eres digno y puedes exigir la iluminación.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

Índice