En el exterior de tu ventana, del pequeño marco de la ventana, se encuentra el
infinito cielo. Puedes mirar a través de la ventana; no verás la totalidad del cielo, desde luego, pero veas lo que veas, es el cielo. De modo que lo único que has de recordar es no creer que lo que has visto es el infinito. Puede ser parte del infinito; no es el infinito. Así, cualquier cosa que pueda imaginar la mente humana puede ser divina, pero es simplemente una parte, un destello. Si recuerdas continuamente eso, entonces no hay error. Entonces, poco a poco, ve destruyendo el marco; poco a poco, destruye completamente la mente de forma que el espejo deje de estar allí y tú te liberes del reflejo y entres en la realidad.
Osho . Yoga: La Ciencia Del Alma Vol 1 .