Recuerda, incluso si tu reloj de pulsera está estropeado, tienes la tendencia y la curiosidad
-porque proviene de los monos- de abrirlo y hacer algo. Es difícil resistirte. No puedes creer que no sepas nada respecto a él. Puede que seas su propietario. Con sólo ser el propietario del reloj, no implica que hayas de saber algo de él. ¡No lo abras! Es mejor llevarlo a la persona apropiada que sepa de esas cosas. Y un reloj es un mecanismo sencillo; la mente es un mecanismo muy complejo. Nunca la abras por ti mismo porque, cualquier cosa que hagas, estará mal.
Osho . Yoga: La Ciencia Del Alma Vol 1 .