La señora Blavatsky obtuvo de fuentes orientalistas el término "del punto dentro del círculo", para
expresar el primer impulso de la Manifestación, y esta idea está también contenida en el término rabínico: Necudah, Bashunah, el Punto Primordial, nombre que se aplica a Kether. Sin embargo, Kether no representa una posición en el espacio. El Ein Soph Aur ha sido llamado el círculo cuyo centro está en todas partes y cuya circunferencia no está en ninguna, afirmación que, como muchas otras que se hacen en ocultismo, parece inconcebible, pero que, sin embargo, representa una imagen a la mente y sirve perfectamente su propósito. Por lo tanto, Kether, y en realidad todos los demás Sephiroth, son simples estados o condiciones de existencia. Debemos tener siempre presente que los planos no se superponen unos encimas de otros en el Emíreo, como los pisos de un edificio, sino que son estados de existencia de diferente clase y que, aunque se han desarrollado sucesivamente en el tiempo, ocurren simultáneamente en el espacio. La existencia de todas las clases está presente en cada ser separado, lo que no es difícil comprender si recordamos que el ser humano está compuesto por un cuerpo físico, emociones, mente y espíritu, todos los cuales ocupan el mismo espacio al mismo tiempo. Cualquiera que haya observado una solución a saturación en un líquido caliente y cómo se van formando los cristales cuando se enfría, puede concebir una idea acerca de la naturaleza de Kether. Llenad un vaso de agua muy caliente y divolved en ella todo el azúcar que se puede, a saturación, y luego, cuando la saturación se enfríe, observad cómo van apareciendo los cristales de azúcar. Cuando hagáis esto realmente sin limitaros a leerlo tendréis un concepto que os permitirá pensar acerca de cómo el Primer Manifestado vino a la existencia, emergiendo del Inmanifestado Primordial. El líquido es transparente y no tiene forma, pero dentro de él se produce un cambio y comienzan a aparecer cristales sólidos visibles y de formas definidas. Y de la misma manera podemos concebir que algún cambio ocurre dentro de la Luz Infinita cuyo resultado es que Kether se cristaliza en ella. Ahora, no nos proponemos hablar profundamente de la naturaleza de los Sephiroth, sino simplemente realizar el bosquejo general del Arbol de la Vida. En el curso de estas páginas trataremos una y otra vez el asunto, hasta alcanzar un concepto comprensivo del mismo, lo cual sólo se puede hacer gradualmente, pues si empleáramos mucho tiempo para tratar algún punto aislado, antes que el estudiante lograra hacerse un concepto general, mucho de ese tiempo sería malgastado, pues no se comprendería la importancia que ese concepto generalmente puede tener para la concepción del bosquejo en conjunto. Los mismos rabbis aplican a Kether la denominación de Secreto de secretos, a la Altura inescrutable, como indicando que la mente humana apenas si puede saber algo acerca de Kether. Vale la pena hacer notar que el judaísmo exotérico, cuyo heredero, no muy afortunado, es el Cristianismo, no contiene concepto alguno sobre las emancipaciones o desbordamiento de un Sephirah en otro. Declara que Dios hizo el mar, las montañas y las bestias del campo, y visualizamos todo ese proceso, si es que realmente llegamos a visualizarlo, como la obra de artistas celestiales, que modelaban cada frase de la manifestación y ponían el producto terminado en el mundo. Este concepto ha mantenido la ciencia atrasada durante centenares de años, en la Europa occidental, y al final los hombres de ciencia tuvieron que romper con la religión y soportar persecuciones como herejes para poder llevar a la doctrina de la evolución, que era la que explícitamente se enseñaba en la Tradición Mística de Israel, una tradición con la que indudablemente estaban bien familiarizados los que escribieron el Antiguo Testamento, porque su obra está llena de referencias e implicaciones cabalísticas.
Dion Fortune . La Cabala Mistica .