«Si me amaseis os alegraríais de lo que os he dicho: que me voy con
mi padre, porque mi padre es mucho más grande que yo». Deseemos que nuestro consolador particular, o el espíritu que debe nacer en nosotros, vuelva pronto con su padre, porque su padre es más grande que él y porque, con ello, tene- mos que conseguir nuevas fuerzas, nuevos favores y nuevos consuelos. Si lo amamos, tenemos que desear este regreso a su padre, porque así debe hacer no sólo nuestra felicidad, sino también la suya propia, por su unión con su origen.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .