Una palabra más podrá, tal vez, ayudar a persuadirnos y a aumentar nuestro ánimo para

trabajar en esta gran empresa, por lo que no vamos a callarla. El hombre, sometido a las leyes de su materia, está aprisionado y limitado por sus cuatro costados y, para atarlo de esta manera, ha sido necesario que se junta- sen, formando una especie de unidad, los poderes, las fuerzas y las facultades que él había dejado salir de sí mismo y había diseminado por todas las regiones para producir el desorden de sus planos impíos y mentirosos: el enemigo sigue apoyándose en las cadenas con que lo ha cargado y pretende con ello tratar como su juguete y su víctima a quien otras veces ha fingido que quería tratar como su amigo. Pero este doble peso, que reúne y concentra cada vez más, formando una unidad, los poderes y las facultades del hombre, le da, en su misma privación, una imagen nueva de esta unidad que él habría debido representar, en su justo desarrollo, y esta armonía concentrada, recuperando de forma natural una especie de relación con la armonía superior y libre, lo atrae insensiblemente a ella y ella recibe de él los auxilios que es capaz de recibir, según su medida torpe y restringida.

Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .

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