Los poderes conscientes del pensamiento, puestos al servicio de los sentidos, hacen del

hombre un bruto más peligroso y feroz que ningún otro, y las fuerzas más profundas y sutiles inherentes al espíritu—materia mental prestan a la naturaleza pasional una violencia y agudeza que no se encuentran en las razas inferiores.

Annie Besant . La sabiduría antigua .

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