Cada experiencia está condicionada por la experiencia pasada. No hay, pues, una experiencia que sea
nueva, siempre se halla coloreada por el pasado. En el proceso mismo de experimentar existe la distorsión que surge desde el pasado, siendo éste el conocimiento, la memoria, las diversas experiencias acumuladas, no sólo la individual sino también las de la raza, las de la comunidad. Ahora bien, ¿es posible negar toda esa experiencia? No sé si han investigado la cuestión del negar, qué significa negar algo. Significa la capacidad de negar la autoridad del conocimiento de la experiencia, de la memoria, negar a los sacerdotes, negar a la Iglesia, todo lo que ha sido impuesto sobre la psique. Para la mayoría de nosotros sólo hay dos medios de negar: a través del conocimiento o a través de la reacción. Ustedes niegan la autoridad del sacerdote, de la Iglesia, de la palabra escrita, el libro, ya sea porque han estudiado, inquirido y acumulado otros conocimientos o porque ello no les gusta y reaccionan en contra. Mientras que la verdadera negación implica, ¿no es así?, que uno niega sin saber lo que va a ocurrir, sin ninguna esperanza futura. Decir: “No sé qué es lo verdadero, pero esto es falso” es, ciertamente, la única negación legítima, porque esa negación no procede de un conocimiento calculado ni es producto de una reacción. Después de todo, si uno sabe adónde va a conducirlo su negación, ésta es, entonces, un mero canje, una cosa del mercado y, por lo tanto, no es en absoluto una verdadera negación.
Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .