Cuando Crookes emprendió en Londres la investigación de los fenómenos mediumnímicos, recrudecieron las acritudes y
desdenes de los científicos europeos y americanos hacia tan misterioso problema. el insigne físico fue el primero en presentar al público uno de aquellos supuestos centinelas que guardaban las puertas cuyo dintel estaba prohibido atravesar. Después de Crookes, hubo otros científicos que tuvieron el heroico valor, dada la impopularidad del asunto, de ocuparse en serio de los fenómenos psíquicos. Mas por desgracia la flaqueza de la carne no correspondió a la voluntad del espíritu, y retrocedieron ante la pesada carga del ridículo, que cayó por entero sobre los hombros de Crookes. En cuanto al provecho obtenido por este sabio de sus investigaciones y al agradecimiento de sus propios colegas, basta leer las Investigaciones de los fenómenos espiritistas.
H.P. Blavatsky . Isis sin Velo. Tomo 1 .