Sueña el sueño imposible. Al principio puede parecer casi absurdo. Lo parece. Pero si es

lo suficientemente fuerte, transforma tu realidad. He oído que... Una vez crecieron tres árboles en la ladera de una colina, y mientras se cimbreaban con la brisa soñaban lo que les gustaría ser. «Me gustaría que me cortaran un día», dijo el primer árbol, «y me convirtieran en la cuna de un bebé». «Me gustaría ser cortado un día», dijo el segundo, «y convertirme en un gran barco surcando los mares, llevando tesoros y piedras preciosas». Y el tercero dijo: «Me gustaría estar en la cima de una colina y señalar el cielo a la gente.» Un día pasaron por allí los leñadores y cortaron el primer árbol. «Quiero ser la cuna de un bebé.» Pero lo convirtieron en un pesebre, y cuando nació el niño Jesús lo pusieron con cuidado en el pesebre porque no había ningún otro sitio en el que ponerlo. Y el árbol dijo: «Esto es muchísimo más maravilloso que lo que nunca soñé.» Los leñadores dijeron sobre el segundo árbol: «Vamos a convertir este árbol en una barca de pesca.» Pero el árbol dijo: «¡No! No quiero ser una barca de pesca; quiero ser un gran barco que lleve tesoros y piedras preciosas.» Pero convirtieron al árbol en una barca de pesca y la pusieron en un lago, y un pescador llamado Simón Pedro compró la barca, y Jesús navegó en la barca e impartió sus enseñanzas desde ella. Y el árbol dijo: «Esto es muchísimo más maravilloso que lo que nunca soñé.» Y del tercer árbol dijeron: «Hagamos una cruz con él.» Pero el árbol dijo: «No quiero ser una cruz..., una cosa vergonzosa en la que muere la gente. Quiero estar en la cima de una colina y señalar el cielo a la gente.» Pero hicieron con él una cruz y Jesús fue clavado en esa cruz. Y a lo largo de los tiempos la gente ha mirado esa cruz y les ha apuntado hacia Dios.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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