Y el hablar ha llevado al hombre hasta aquí, hasta la situación en que se

encuentra hoy en día. Una constante mente parlanchina no permite felicidad alguna, ninguna posibilidad de felicidad, porque sólo una mente silenciosa es capaz de mirar hacia adentro, solamente una mente silenciosa puede oír el silencio, la felicidad, que está burbujeando siempre ahí. Pero es tan sutil que, con el ruido de la mente, no lo puedes oír.

Osho . Yoga: La Ciencia Del Alma Vol 1 .

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