Pero ése es el momento de realizar en todas las regiones de su esencia la
renovación que ya ha tenido lugar en él mismo y que debía empezar a partir de su corazón o de su propio centro, para extenderse a continuación a las extremidades más alejadas, lo mismo que la reparación universal ha salido del corazón de Dios para extenderse después por todas las naciones. ¿Para qué iba a quedarse el reparador universal tres días en la tumba, si no fuese para purificar y examinar con todo rigor las tres regiones que componen todo el universo visible e invisible?.
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .