De modo que esta acción prosigue interminablemente, como el mar con la marea que se

aleja y después regresa, a veces muy, muy lentamente, otras veces rápidamente, peligrosamente. Un ir y venir; acción reacción acción. Tal parece ser la naturaleza de este movimiento, a menos que dentro de uno exista un orden profundo. Ese orden mismo producirá orden en la sociedad, no mediante la legislación, los gobiernos y todo eso aunque mientras haya desorden y confusión, proseguirán la autoridad y las leyes que son creadas por nuestro propio desorden. Las leyes son una hechura del hombre, son un producto del hombre tal como lo es la sociedad. Así, lo interno la psique- crea lo externo conforme a su limitación; y lo externo controla entonces lo interno y lo moldea. Los comunistas han pensado, y probablemente siguen pensándolo, que controlando lo externo, elaborando ciertas leyes, regulaciones, instituciones, ciertas formas de tiranía, ellos pueden cambiar al hombre. Pero hasta ahora no han conseguido su propósito, y jamás lo conseguirán. Ésta es, asimismo, la actividad de los socialistas. Los capitalistas lo hacen de un modo diferente, pero es la misma cosa. Lo interno domina siempre lo externo, porque lo interno es más fuerte, mucho más vital que lo externo.

Jiddu Krishnamurti . El Último Diario .

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