Y saben que las personas religiosas son personas desgraciadas..., tristes, con las caras largas. No
pueden creer que puedas ser religioso y bailar, y que puedas ser religioso y te rías, y que puedas ser religioso y, no obstante, ser feliz. Entonces, ¿qué pasa con todos sus santos? ¿Eran tontos? Vivieron con la cara larga toda su vida; la vida les pareció una carga, como si llevaran una montaña sobre la cabeza. Y tú estás tan ligero, tan liviano, sin ninguna carga, sin nada grave en ti. Te ríes tanto... ¿Cómo van a creer que eres religioso? Lo único que parece posible es que te hayan hipnotizado. ¿Cómo vas a ser tan feliz en un mundo tan desgraciado? No es posible. Debes estar viviendo en una especie de ilusión. Por eso dicen: «Este hombre es una fuerza del mal, te ha hipnotizado; la risa que tienes es falsa, la alegría que sientes es falsa.» Su desdicha es buena y verdadera, y tu alegría es falsa. Cuando puedan hacer que te sientas desgraciado de nuevo, se sentirán tranquilos: su hijo ha vuelto a casa, o su hija ha vuelto a casa.
Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .