Hombre, no te lamentes de las conmociones de tu región. La mano que las dirige
sólo tiene planes favorables para ti. Si se ha vertido sobre la tierra la copa de la amargura, ¿no es para limpiar los ojos de nuestra inteligencia, lo mismo que la copa medicinal hace que nuestros órganos corruptibles recuperen su pureza original? Cuanto más te destruya esta copa amarga en el fuego del dolor, más agradecido debes estar al que te la ofrece, porque sólo puede producirte una gran purificación, si eres culpable, o una gran gloria y una gran recompensa, si te has dedicado a la obra sagrada...
Louis-Claude de Saint Martin . El Hombre Nuevo .