Si ustedes ven el peligro, actuarán; y es sólo la mente que ve, escucha y
aprende, la que es siempre feliz. Por lo tanto, nunca hay acción, sino un actuar. En el actuar, que es el principio activo, no hay división y, por ende, no hay conflicto. El aprender es un movimiento, y lo que está en movimiento es libre. Pero una mente que tiene conclusiones, fórmulas, opiniones, juicios, compromisos, no es una mente libre; cuando se enfrenta al inmenso, complejo problema del vivir, es incapaz de afrontarlo totalmente, completamente, con ese sentir de lo sagrado. De modo que eso es lo que está frente a ustedes. La casa está ardiendo, y todo lo que intenten en términos del pasado no apagará el fuego. La extinción de ese fuego exige una calidad nueva de la mente y un movimiento vital y por completo diferente del corazón.
Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .