DESDE EL MOMENTO EN QUE TODOS TENEMOS LIBRE ALBEDRÍO, AQUEL QUE NO CONTROLE

SU MUNDO SENSORIAL SE ENCONTRARÁ DESTROZÁNDOLO TODO, LO PROPIO Y LO AJENO. TAL ES LA GRAN LEY, A MENOS QUE EL INDIVIDUO CORRIJA SUS PENSAMIENTOS Y SENTIMIENTOS Y LOS MANTENGA CORREGIDOS.

Saint Germain . El Libro de Oro de Saint Germain .

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