Un político le dijo a Sócrates cuando éste se moría: «Sentimos que tuviera

que ser condenado a muerte.» Sócrates abrió los ojos y dijo: «No se preocupe. No pueden matarme; viviré. Y recuerde, su nombre sólo será recordado debido a mí.».

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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