Freud es una revolución, Freud es un hito en la historia de la consciencia humana,

una gran fuerza transformadora; él mismo no estaba iluminado como Buda o Mahavira o Jesús, pero es un gran revolucionario en lo referente al pensamiento y ha abierto una puerta que posibilita muchas cosas. Sin Freud no habría sido posible que Occidente comprendiera el Tantra. Sin Freud, el hombre occidental habría vivido con puritanismo victoriano, con falsedad victoriana, con hipocresía. Freud abrió las puertas: para ser más real, para ser más auténtico, para ser más honesto y verdadero. Jung y Adler son solo ramas. Jung venía después de Freud. Freud mismo lo había elegido como su sucesor; por eso digo que era casi como un Judas. Pero Freud erró, erró en la elección misma. Él mismo no estaba iluminado. Debió de haber elegido al más egocéntrico porque el más egocéntrico es el más activo. Jung era el más egocéntrico. Puedes mirar las viejas fotos de él con Freud y con los demás discípulos: Jung parece el más egocéntrico; ni siquiera en las fotos puede ocultarlo, es imposible de ocultar. Lo lleva escrito en la cara. Freud debió de elegirle a él porque era elocuente, tenía talento, era activo, tremendamente activo; era capaz de filosofar, especular, argumentar. Pero todas esas cualidades eran tales que tarde o temprano Jung se dio cuenta de que podía ser un maestro por derecho propio, podía empezar una nueva escuela de psicología por derecho propio; ¿por qué iba a molestarse en hacer el papel de segundón? Podía ser el número uno, el primero, el delantero. Empezó su propia escuela. Su escuela es solo una reacción, una reacción a Freud, y su comprensión nunca profundizó mucho. Aunque estaba tanteando en la dirección correcta; pero lo repito: era un tanteo, no era consciente de ello. Simplemente se estaba alejando todo lo que podía de Freud. Freud tenía una actitud muy científica; Jung empezó a adentrarse en el mundo del arte, simplemente para alejarse de Freud. Empezó a ir en la dirección apropiada por accidente. Freud era muy matemático; Jung empezó a volverse poético. Freud era muy objetivo; Jung empezó a volverse cada vez más mitológico. Eso era debido a la reacción: tenía que probar que estaba separado, absolutamente separado de Freud; tenía que desechar todo tipo de vínculos con Freud, tenía que convertirse en su polo opuesto..., sin darse cuenta de ello, inconscientemente. Pero, en cierto modo, esto fue bueno. Fue bueno en el sentido de que tropezó con varios hechos con los que Freud no habría tropezado por sí mismo, porque era tan prosaico, práctico, pragmático, científico; un realista. Y hay muchas cosas que los hechos no pueden contener.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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