El pensamiento recto es condición necesaria de la vida recta. La rectitud de juicio es
indispensable para la rectitud de conducta. Ya se nos presente con el nombre sánscrito, Brahma-Vidya, o con el de Teosofía, derivado del griego, la Sabiduría Divina viene en nuestro auxilio para realizar ese doble objeto presentándose a la vez como filosofía racional entre todas y como religión y ética universales. Hablando de las Santas Escrituras, un cristiano devotísimo decía una vez que había en ellas fondos que podrían pasar a nado un niño y abismos donde se hundiría un gigante. Podemos decir otro tanto de la Teosofía, pues entre sus enseñanzas, las hay tan sencillas y prácticas, que una inteligencia vulgar puede comprenderlas y aplicarlas, mientras otras son tan profundas que la más vigorosa inteligencia desmaya en el esfuerzo de conocer todo su alcance.
Annie Besant . La sabiduría antigua .