En determinadas ramas de la ciencia, sabían los antiguos más de lo que hasta ahora

han descubierto los modernos. Aunque muchos repugnen confesarlo, así lo reconocen algunos sabios. El doctor A. Todd Thomson, que publicó la obra Ciencias ocultas, escrita por Salverte, dice a este propósito: “Los conocimientos científicos de los primitivos tiempos de la sociedad humana eran mucho mayores de lo que los modernos suponen, pero estaban cuidadosamente velados en los templos a los ojos del vulgo y tan sólo a disposición de los sacerdotes”. Al tratar de la cábala, dice Baader que “no sólo debemos a los judíos la ciencia sagrada, sino también la profana”.

H.P. Blavatsky . Isis sin Velo. Tomo 1 .

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