De extrema lentitud es el crecimiento del cuerpo permanente que con la conciencia divina constituye
lo que llamamos el Pensador. Su nombre técnico es el de cuerpo causal, porque reúne en sí los resultados de todas las experiencias, los cuales obran como causas y modelan las existencias futuras. El cuerpo causal es el único permanente de cuantos el hombre necesita en su encarnación. Sabemos, en efecto, que los cuerpos físico, astral y mental inferior se reconstruyen en cada encarnación.
Annie Besant . La sabiduría antigua .