El genuino motivo de anhelar el conocimiento de sí mismo pertenece al conocimiento y no
al Yo. El conocimiento de sí mismo merece que lo anhelemos a causa de que es conocimiento, y no porque pertenezca al Yo. El principal requisito para adquirir el conocimiento de sí mismo es el amor puro. Anhela el conocimiento por puro amor, y el conocimiento coronará eventualmente el esfuerzo. Cuando un estudiante se impacienta, es prueba segura de que obra por la recompensa, no por amor, lo cual demuestra también que no merece la gran victoria reservada a quienes verdaderamente obran por puro amor.
H.P. Blavatsky . Ocultismo Practico .