La oración es un fenómeno totalmente diferente. En la oración es necesario el otro, nunca

puede ser independiente. La oración es más como el amor, la oración es un diálogo; la meditación no es un diálogo, no es como el amor. Es exactamente lo opuesto al amor. En la meditación te quedas completamente solo, sin ninguna parte a la que ir, nadie con quien relacionarte, ningún diálogo, porque no hay nadie más. Eres simplemente tú mismo, absolutamente tú mismo. Éste es un enfoque totalmente diferente.

Osho . El Secreto de los Secretos: Charlas sobre el secreto de la Flor Dorada .

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