La Redención es un acto eterno que no se puede situar ni en el tiempo
ni en el espacio; el sacrificio de Cristo es una manifestación de ella o una realización particular sobre el plano humano; los hombres podían y pueden beneficiarse de la Redención tanto antes como después del advenimiento del Cristo Jesús, y fuera de la Iglesia visible tanto como en su seno.
Schuon Frithjof . De la unidad transcendente de las religiones .