El lago era muy profundo, con peñascos que se elevaban a ambos lados. Uno podía
divisar la otra orilla, boscosa, con nuevas hojas primaverales; y aquella margen del lago era más escarpada, con más árboles y un follaje tal vez más espeso. Esa mañana el agua se hallaba en calma y su color era verde azulado. Es un bello lago. Había cisnes, patos y, ocasionalmente, un barco con pasajeros.
Jiddu Krishnamurti . Encuentro Con la Vida .