Como quiera que reside en cuerpo mortal, le conturba la duda; y esto denota su
ignorancia de algo, por lo que ha de disipar la duda con "la espada del conocimiento", pues si sabe responder a una duda, de seguro la disipará. Toda duda proviene de la naturaleza inferior y nunca de la superior. Así es que, a medida que aumente su devoción, será mayor el conocimiento que adquiera de su naturaleza sátvica. Porque se ha dicho: "El perfecto de la devoción (o que perseverare en su ejercicio) adquiere con el tiempo, espontáneamente, conocimiento espiritual." y también se ha dicho: "El hombre de mente dubitativa no goza de este mundo ni del otro, ni logra bienaventuranza final." Esta última frase rebate la idea de que si existe en nosotros el Yo superior, acabará por triunfar de la necesidad de conocimiento, aunque seamos indolentes y recelosos, y nos conducirá a la bienaventuranza final con la colectiva corriente de la humanidad.
H.P. Blavatsky . Ocultismo Practico .