Y bien, yo digo que es claramente posible que la mente esté libre de todo
condicionamiento, lo cual no quiere decir que ustedes deban aceptar mi autoridad. Si aceptan esto basados en la autoridad, jamás descubrirán, ello será otra sustitución y, como tal, no tendrá significado alguno [...]. La comprensión de todo el proceso del condicionamiento no llega a través del análisis o de la introspección, porque tan pronto tenemos el analizador, ese analizador mismo forma parte del trasfondo; por lo tanto, su análisis carece de toda importancia [...]. ¿Cómo puede la mente ser libre? Para ser libre, debe no sólo ver y comprender su balanceo pendular entre el pasado y el futuro, sino también estar alerta al intervalo entre pensamientos [...]. Si observan con suma atención, verán que si bien la respuesta el movimiento del pensar- parece tan rápida, hay resquicios, intervalos entre pensamientos. Entre dos pensamientos existe un periodo de silencio que no está relacionado con el proceso del pensar. Si observan, verán que ese periodo de silencio, ese intervalo, no es del tiempo; y el descubrimiento de ese intervalo lo libera a uno de su condicionamiento; o, mejor dicho, no lo libera «a uno», sino que hay liberación respecto del condicionamiento [...]. Sólo cuando la mente no da continuidad al pensamiento, cuando está quieta con una quietud no inducida, o sea, sin causa alguna, sólo entonces podemos liberarnos del trasfondo.
Jiddu Krishnamurti . El Libro de la Vida .